Como respuesta a esta invitación, las comunidades de Formación, etapa del Profesorio, han programado, tres veces al año, jornadas para el conocimiento mutuo. La primera tuvo lugar en el mes de septiembre de 2021, al inicio del curso académico 2021-2022, para realizar juntos los ejercicios espirituales. La segunda jornada se llevó a cabo en el mes de diciembre, entorno al puente de la Inmaculada y la Constitución. Y, la tercera, se ha desarrollado en el último fin de semana del mes de marzo.

Eucaristía y visita a museos de la ciudad

El encuentro tuvo varios momentos especiales y dignos de ser destacados: En primer lugar, la celebración de la Eucaristía en la parroquia San Agustín de Valladolid, presidida por el P. Domingo Natal, miembro del Equipo de Formación de Valladolid. En la homilía destacó la importancia de vivir la cuaresma y, sobre todo la Semana Santa, cuidando la comunión con Dios y con los hermanos, centrados en el amor más grande, el que da la vida por los demás a ejemplo de Cristo, que padeció murió y resucito por nosotros.

Tras la celebración de la Eucaristía, los participantes en el encuentro realizaron una visita por varios museos de la ciudad: el del Monasterio de San Joaquín y Santa Ana, y el de la Catedral de Valladolid. En esta ocasión no se visitó el Mueso Oriental, cuya sede está en el Convento de los agustinos, porque ya se había visto en el encuentro anterior.

Comida y deporte fraterno

La jornada de la mañana se culminó con la comida fraterna, junto con los hermanos de la Comunidad Conventual de Valladolid. Durante el café se recordó a varios hermanos que habían celebrado su cumpleaños en el mes de marzo, que eran en buen número de ellos.

La tarde se centró en el deporte, concretamente en el partido de fútbol entre los dos Profesorios. Como dice el refrán: “Al hermano se le conoce mejor en la mesa y en el deporte”.

Los ganadores fueron los Profesos de la Comunidad de Valladolid, que derrotaron a los Profesos de El Escorial por tercera vez consecutiva. Se repartieron trofeos/premios al equipo ganador, al segundo equipo, al mejor jugador y al mejor portero.

Tras el partido, tocaba recobrar fuerzas con la merienda-cena, momento final de dialogo fraterno en la sala de estar de la Comunidad de Formación de Valladolid.

El encuentro concluyó con la foto oficial de todos los participantes, para inmortalizar la amistad y la fraternidad agustiniana entre los jóvenes seminaristas agustinos.