ACTUALIDAD

La Provincia agustina de San Juan de Sahagún, comprometida con los más vulnerables

En el año 1997, la entonces Provincia Matritense, comenzó su colaboración económica con un proyecto de Cáritas para atender a personas enfermas de sida. La nueva Provincia ha decidido mantener este compromiso con la Casa de acogida San Agustín y Santa Mónica, que actualmente ayuda a personas en riesgo de exclusión social.

Comparte

[addthis tool=»addthis_inline_share_toolbox_nken»]

En la década de los noventa del siglo pasado, la Provincia agustina Matritense decidió colaborar con alguna entidad, fuera de la Orden de San Agustín, que atendiera alguna necesidad social nueva. Con este objetivo, explica el P. Juan Enrique Álvarez, OSA, llamaron a las puertas de Cáritas Madrid para conocer con más detalle el panorama social de la ciudad.

La Provincia agustina de San Juan de Sahagún e España colabora con la Casa de Acogida San Agustín y Santa Mónica de Cáritas Madrid.

Eran años en los que se hablaba de la enfermedad del SIDA en voz baja y las personas afectadas, con frecuencia, la vivían rodeados de mucha soledad. Los tratamientos aún no habían logrado cronificar la dolencia, así que, cuando un enfermo llegaba a la fase terminal, si además vivía en la calle o sin recursos, su situación podía complicarse mucho.

En el Capítulo Provincia Intermedio de la Provincia Matritense del año1996, se aprobó una donación y, en 1997, se hizo la primera a un centro de acogida para enfermos de SIDA de Cáritas. Eran necesarios muchos recursos para mantener abierta esta Casa en la que, fundamentalmente, se hacía una labor de acompañamiento, controlando las medicaciones de cada uno y supervisando citas médicas.

Veinticinco años después, la situación social ha cambiado y también la realidad de la enfermedad, que tiende a cronificarse. Ahora, el compromiso de la Provincia agustina de San Juan de Sahagún de España es con la Casa de acogida San Agustín y Santa Mónica, de Cáritas Madrid, que atiende a personas en riesgo de exclusión social, y a la que destina una dotación económica de 250.000 euros anuales.

Actualmente, la Casa de acogida tiene capacidad para 19 personas, que pueden vivir allí entre dos meses y dos años. El clima familiar de la casa y el acompañamiento socioeducativo que se ofrece permite a las personas que conviven allí sentirse valoradas, crecer en autonomía personal y mejorar su integración social.

La labor que se desarrolla en la Casa de acogida San Agustín y Santa Mónica es posible gracias a la supervisión de Cáritas, al compromiso de 35 voluntarios, al trabajo de 3 hermanas de la Congregación AMICO y al apoyo económico de la Orden de San Agustín.

También te puede interesar

Suscríbete a nuestra Newsletter

[mc4wp_form id=»360″]